La piel es el órgano más grande del cuerpo, y se encarga de proteger el organismo de microorganismos y agentes que puedan poner en peligro la salud. Por esta razón, el cuidado de la piel ha tomado importancia no solo en la cosmética, sino también en diferentes áreas de la medicina moderna.
El cuidado de la piel es un tema de importancia en cualquier etapa de nuestra vida. Esto se debe a que constantemente, la piel está expuesta a factores que la pueden dañar como la contaminación y los rayos del sol.
Aunque formen parte de un proceso natural, es posible retrasar o limitar estos efectos negativos sobre la piel. El uso adecuado de los productos cosméticos puede facilitar esta tarea, además de mantener la piel limpia e hidratada.
También, la visita con el especialista es un punto importante en el cuidado de la piel. A partir de las intervenciones médicas, se pueden identificar mejor las necesidades de cada persona y ofrecerle soluciones convenientes.
¿En qué consiste el cuidado de la piel?
El cuidado de la piel se refiere a una serie de pasos o técnicas a seguir para evitar el daño a largo plazo de ella. En estos pasos, interviene la higiene y el uso de algunos productos para aumentar la resistencia y la salud de la piel.
De igual manera, el cuidado de la piel ha surgido como una alternativa que permite ahorrar tiempo. Esto se debe a que esta práctica surgió a partir de la necesidad de una gran cantidad de mujeres para lucir una piel más saludable al mismo tiempo que trabajan, cuidan de su familia y realizan sus actividades preferidas.
También, consiste en evitar o eliminar prácticas poco saludables para la piel, tanto de la cara como del cuerpo. Siguiendo de manera adecuada estos pasos, es posible lucir una piel más saludable en cuestión de poco tiempo.
¿Cuáles son las rutinas diarias para el cuidado de la piel?
Definir la cantidad de productos que se van a usar
Muchas personas están de acuerdo en usar pocos productos para la cara o para el cuerpo. Ya que consideran que es mejor usar uno o dos cosméticos para no sobrecargar las propiedades de la piel. Además, utilizar una gran cantidad de productos puede facilitar la aparición de alergias y sensibilidad en la piel.
Sin embargo, también es recomendable emplear varios productos con el fin de corregir algún problema en concreto. Por ejemplo, en la piel mixta sería adecuado utilizar dos sérums, hidratantes o mascarillas diferentes en cada zona seca y grasa de la piel.
Si no se utilizan varios productos en este tipo de pieles, será difícil encontrar un equilibrio, y por ende, el cuidado de la piel se complicaría porque un solo producto no puede resolver todo, corregir, humectar y fotoproteger. Incluso, esto también se recomienda para los casos de dermatitis, manchas, seborrea y poros abiertos. Aunque esto debe hacerse acompañado de un especialista.
Usar productos destinados a un objetivo en particular
En el cuidado de la piel se tienen que establecer prioridades. No todos querrán los mismos resultados, ya que estos dependen de las necesidades de la piel en cada persona. Los cuidados de la piel más básicos que podemos encontrar en este punto, son:
- Limpieza facial: La limpieza facial ayuda a eliminar toxinas y restos de suciedad en la piel. Lo recomendable es limpiar la cara dos veces al día usando agua micelar, un gel o un limpiador que sea suave. Se puede realizar la limpieza después de levantarse en la mañana y en la noche antes de dormir.
- Hidratación: Después de la limpieza, viene el proceso de hidratación. Esto se puede lograr aplicando una crema hidratante que se ajuste a las necesidades de la piel. Por ejemplo, se puede emplear un gel en las pieles grasas, o con ingredientes naturales si la piel es sensible. De preferencia, estos productos deben contener vitaminas y antioxidantes.
- Protección solar: Los rayos del sol son los responsables de la aparición de arrugas, en la piel. Por esta razón, es recomendable utilizar un protector solar diario con un FPS (factor de protección solar) de cuando menos 30 o más.
- Rutina antienvejecimiento: Para complementar los pasos anteriores sobre el cuidado de la piel, se debe aplicar un suero o crema por la noche que contengan retinoles o ácidos AHA o BHA. Estos tienen la capacidad de regenerar la piel y mejorar su apariencia
Realizar rutinas en el momento preferido
Las rutinas diarias suelen ser efectivas para el cuidado de la piel. Sin embargo, también pueden elegirse otros periodos para cuidarla. De manera semanal, se puede usar un exfoliante para retirar las capas que ya no sirven de la piel.
Si el cuidado de la piel se quiere hacer de manera mensual, lo más adecuado es visitar al dermatólogo para recibir una limpieza o facial. Aquí se combinan los procedimientos manuales, el uso de tecnología avanzada y la aplicación de productos químicos.
De la misma manera, un cuidado de la piel que se quiera hacer de forma anual puede basarse en una revisión médica de pecas, manchas como lentigos solares, lunares
venas o problemas de piel, como la rosácea.
Define tu rutina para el cuidado de la piel
Con ayuda de un dermatólogo o especialista, podrás identificar mejor las necesidades de tu piel. De esta manera, será más fácil encontrar un tratamiento efectivo que no represente ningún daño para tu salud.
Recuerda que no es recomendable utilizar productos sin conocer los ingredientes, ya que un uso excesivo o inadecuado puede causar daños en la piel. Si quieres recibir atención personalizada, contáctanos para tener más información sobre el cuidado de la piel.
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